La Asociación de la Prensa de La Coruña fue creada el 5 de diciembre de 1904 por un grupo de destacados periodistas e intelectuales coruñeses. Es una de las más veteranas de España y la más antigua de Galicia. La comisión ejecutiva encargada de efectuar las gestiones necesarias para su creación y de elaborar los Estatutos estaba formada por cinco periodistas y escritores de prestigio: Urbano González Varela, Wenceslao Fernández Flórez, Robustiano Faginas Álvarez, Alfredo Tella Comas y Juan Tejada Velasco. De la redacción del Reglamento se encargaron José María González González, Alejandro Barreiro y Francisco Rodríguez Pereira. En aquel tiempo, la ciudad contaba con tres diarios: La Voz de Galicia, El Noroeste y El Eco de Galicia.
La asamblea general en la que se constituiría la sociedad se celebró en los salones de la Reunión Recreativa e Instructiva de Artesanos de A Coruña. Participaron más de cuarenta profesionales de la comunicación, aunque ya se habían inscrito noventa. Todos ellos fueron considerados socios fundadores. Entre ellos había nombres muy ilustres en el campo del periodismo, de las artes y de la literatura. Muchos de esos socios trabajaban ya en la gestación de la Real Academia Galega (1905), y hubo varios que llegaron a ocupar altos cargos directivos. Destacan Urbano González Varela, Wenceslao Fernández Flórez, Andrés Martínez Salazar, Robustiano Faginas Álvarez, Manuel Lugrís Freire, Galo Salinas Rodríguez, Francisco Tettamancy Gastón, Eugenio Carré Aldao, Manuel Casás Fernández y Eladio Rodríguez González.
A lo largo de su historia, la Asociación llevó a cabo múltiples actividades propias de su naturaleza y también otras con fines benéficos, como fueron la organización de corridas de toros o los bailes de disfraces, que duraron hasta el séptimo decenio del siglo pasado.
Parte esencial de los fines de APC ha sido la asistencia médica a sus afiliados, que llevó en los años 60 a la firma de un importante convenio con una aseguradora, y el asesoramiento jurídico gratuito en cuestiones profesionales y laborales.
Otras actividades destacadas han sido -y lo siguen siendo- la celebración de conferencias y convenciones (como la Asamblea Nacional de Asociaciones de la Prensa de 1948, o la I Conferencia de Presidentes de la FAPE en 2005), mesas redondas, exposiciones de fotografía y pintura, el Premio Pérez Lugín de Periodismo, presentaciones de libros, etc.
En mayo de 2004, la celebración de elecciones dio entrada en la directiva a un grupo de jóvenes periodistas. La organización del Centenario fue su primer gran reto, junto con la necesidad apremiante de incrementar la lista de asociados y hacer que la actividad social y cultural de esta entidad se presuma de nuevo muy alentadora en los próximos años.